Existen dos tipos de receptores para los cannabinoides, los CB1 y los CB2.
Los CB1 están en la corteza cerebral. Y son los responsable de sus acciones psicodislépticas.
Los receptores CB2 están en el tracto esplénico y son los responsables de las acciones inmunológicas y antiinflamatorias de éstos compuestos.
En los últimos años abundan los artículos que hablan de las bondades terapéuticas de los cannabinoides para determinadas enfermedades; por ejemplo para el dolor de cáncer en pacientes terminales, glaucoma, epilepsia, nausea, etc...
El diseño de nuevas moléculas de cannabinoides nos permitiría tener compuestos que no sean agonistas sobre los receptores Cb1 ( con lo que no tendrían las temidas acciones sobre la corteza cerebral) y que fueran agonistas sobre los CB2 ( diseño de nuevos medicamentos anti inflamatorios o sobre el sistema inmune).
Hay una relación estructural importante, demostrada por unos investigadores ( del grupo de Jonh W.- Huffchinson, de la Universidad de Carolina del Sur) que nos permiten saber si determinados compuestos son agonistas CB1 o Cb2. Y éste nudo gordiano es la presencia de una cadena lateral aminoalquilindol . Son los llamados Aaminoalquilindol análogos (AAI) en terminología anglosajona. Al parecer éstos compuestos interaccionan específica con el receptor CB1.
Esto se demostró experimentalmente median te mera " fuerza bruta". usaron un compuesto, el WIN55,212-2 al que se le fueron reemplazando por diferentes cadenas metilo, propilo, etc... hasta el grupo heptilo en el carbono 2 de la molécula. Se comprobó que cuando la cadena era de entre 3 y 6 carbonos, pues aumentaba la afinidad del compuesto por el receptor CB1.O lo que es lo mismo, aumentaban sus efectos psicotrópicos. Esto se realizó mediante radioligandos marcados.
Esta relación de afinidad es altamente especifica, ya que la sustitución por un grupo de siete carbonos producía la perdida total de afinidad por el receptor CB1.
El efecto agonista sobre el este receptor CB1 sería el que causase los efectos perjudiciales sobre el sistema nervioso central. Este efecto hay sido estudiado en modelos experimentales en los cuales se han usado
a) Utilizando derivados halogenoides de los JWH ( por ejemplo el JWH-018), que tiene descrito producir psicosis. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2011.01.012
b) Utilizando un antagonista competitivo demostrado, como es la sustancia AM 251.
El grupo de la Universidad de Clemson ( donde trabajó JW Huttchinson) propugna el concepto de "Modelo Farmacopoforos", o lo que es lo mismo, el uso del diseño de nuevos fármacos mediante el ordenador, tal como postulan los químicos-farmacéuticos,M. Afshar, ... J. Sallantin, en " Computer-Assisted Drug Design", en Comprehensive Medicinal Chemistry II, 2007.
El efecto agonista sobre el este receptor CB1 sería el que causase los efectos perjudiciales sobre el sistema nervioso central. Este efecto hay sido estudiado en modelos experimentales en los cuales se han usado
a) Utilizando derivados halogenoides de los JWH ( por ejemplo el JWH-018), que tiene descrito producir psicosis. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2011.01.012
b) Utilizando un antagonista competitivo demostrado, como es la sustancia AM 251.
El grupo de la Universidad de Clemson ( donde trabajó JW Huttchinson) propugna el concepto de "Modelo Farmacopoforos", o lo que es lo mismo, el uso del diseño de nuevos fármacos mediante el ordenador, tal como postulan los químicos-farmacéuticos,M. Afshar, ... J. Sallantin, en " Computer-Assisted Drug Design", en Comprehensive Medicinal Chemistry II, 2007.